Las autoridades de la Secretaría de Educación y de Salud del estado de Nayarit anunciaron que este lunes 24 de mayo queda suspendido el regreso a clases presenciales en 32 escuelas de primaria y telesecundaria en la entidad por el aumento de casos de COVID-19.

“La Secretaría de Salud a nivel federal dio a conocer que Nayarit estamos en semáforo amarillo a partir del 24 de mayo al 7 de junio. Como ustedes saben a principios de esta semana anunciábamos que nos sumábamos para iniciar con las primeras 32 escuelas de primaria y telesecundarias, pero al ver que estamos en semáforo amarillo se ha tomado la decisión en conjunto de no regresar a clases presenciales en esas 32 escuelas este día lunes”, informaron autoridades.

“Esto promoviendo la indicación que nos dio el ciudadano gobernador de salvaguardar la vida de las niñas, niños y adolescentes de los padres de familia, las maestros y los maestros y todo el personal de apoyo a la educación y sobre todo de la comunidad donde se iban abrir esas 32 escuelas”, añadieron.

Campeche también suspende regreso a clases presenciales
Este fin de semana el estado de Campeche también informó que suspendía el regreso a clases presenciales por el incremento en los casos de COVID-19 en la entidad.

A través de un mensaje de WhatsApp enviado a periodistas locales, el secretario de Educación de Campeche, Ricardo Koh, explicó que a raíz de un aumento en la entidad del nivel de alerta de bajo (verde) a medio (amarillo), se tomó la decisión de cerrar los 135 planteles que habían vuelto a clases presenciales.

Sin embargo, el regreso a las aulas tardó. Tuvo lugar el 19 de abril, justo cuando comenzaba la vacunación escalonada de los profesionales de la educación en el resto del país.

El objetivo era que los todos los estudiantes pudieran retomar las clases presenciales de forma escalonada antes que acabara el ciclo escolar el 9 de julio, siempre y cuando el nivel de alerta epidemiológica del estado se mantuviera en verde.

Desde el viernes, la mitad de los estados del país están en verde, con lo que podrían iniciar los protocolos para la vuelta a clases, aunque es posible que la experiencia de Campeche invite a la prudencia.